Todavía me parto de risa cuando recuerdo aquella divertida anécdota de adolescente.
Fue el día de pascua de 1.982, y yo, con mis 16 añitos y un mundo nuevo por descubrir, empecé a trabajar de camarero en un lujoso hotel de cinco estrellas.
Enseguida hice amistad con todo el personal de la empresa, sobretodo con las camareras de habitaciones ya que cada mañana venían a la cocina y me ocupaba de prepararles el desayuno.
Una vez desayunadas todas, llegaba Puri, la gobernanta. Una señora de unos 50 años, muy divertida, jovial y muy emprendedora.
Era muy cariñosa y le gustaba mucho contarme cosas mientras tomaba el desayuno.
Con el tiempo tomamos confianza y amistad.
Ese día era lunes de pascua y como tradición en el hotel, se ofrecía a cada cliente un dulce típico en España llamado “mona de pascua”.
La mona de pascua consistía en un pequeño rosco de mazapán con un huevo cocido, y adornado con unas plumas de colores.
El día anterior estuvimos preparando todas las “monas” y todavía estaba encima de la mesa de la cocina la caja con las plumas de colores.
De repente le dije a Puri: ¿Me dejas que te ponga muy guapa?
Ella me dijo: Ya soy guapa, pero si sabes como hacerlo, ponme más guapa todavía.
Entonces empecé a coger plumitas de colores y se las fui colocando en el pelo que llevaba recogido con un pasador.
Ella seguía desayunando siguiendo la broma, riéndose al verme tan concentrado en mi estilismo.
Por un momento, tuve que dejar a Puri, porque llego un cliente y tenia que atenderlo.
Le dije a Puri: espérate un momento antes de mirarte al espejo, que quiero ver la cara que pones.
A continuación me fui a atender el cliente...
Cuando termine volví a la cocina para acompañar a Puri a un espejo pero ella no estaba allí.
Pensé que, tal vez, tardé demasiado y se le hacia tarde, ya que tenia que repasar las habitaciones y hablar con los proveedores.
Pasó la mañana y me olvidé de Puri y su estilismo hasta que sonó el teléfono.
Buenos días, servicio de habitaciones…¿en que puedo servirle?
La respuesta al otro lado del aparato fue la siguiente: ¡Te voy a matar!
Era la voz de Puri.
¿Que ocurre?,- le pregunté-
Después de ponerme las plumas y ponerme “tan guapa” me olvidé de ellas y he estado toda la mañana recibiendo a los clientes, repasando las habitaciones y ordenando a las camareras con las plumas en la cabeza como si fuera de una india.
No pude dejar de reírme. Me dolía el costado de aguantarme las carcajadas.
Y dijo a continuación: ¡Y lo peor de todo es que nadie me ha avisado de que llevaba la cabeza llena de plumas de colores!...
¡Que tiempos aquellos!...
“La juventud es una enfermedad que se cura con los años”
jueves, 21 de octubre de 2010
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11 comentarios:
ja,ja,ja...que bueno...ya hacías tus pinitos ehhhh. Oye, tu tienes la edad de Lía...eres del 70, seguro...y como seas de febrero eres de su mes...
Un besazo majo.
NORMA, soy del 66. Naci el 2 de Febrero. Acuario.
Besicos.
NORMA, es que me confundi con la fecha. Fue en 1982.
Mas besicos
Ricard, yo también soy acuario. Ya te te veía una vena artística amigo. Y mira que no avisarle nadie. Una anécdota muy divertida. Se te ve así, divertido, sensible y buena gente.
Besos wapo.
Muy bueno Ricard!,seguro que no le quedaban mal las plumas a la Puri pues si nadie le advirtió sería por algo.
Saludos afectuosos!
jajajajajajajajajja, genial!!!!
De película :)
jajaja genial, un paso de comedia en la vida misma!
Besos :)
Que bien me la paso con tus recuerdos jaajajajaj
Gracias Ricard :)
Besoss
Jajajajaja, pero eras te terror!!!, me hacés reir tanto con tus locuras sanas, tienes mucho humor y eso me gusta mucho en una persona.
Ahora digo yo y teniendo en cuenta tus travesuras... en el 82 no nacistes y en el 66...mmmmmm! me queda la duda, jaja!.... es una broma.
Besotes
Conseguiste hacerme reir, en un día dificil para mi.
Abrazo. Jabo
Que papelón!!! Pero seguro se rieron a montones!
Que divertido!
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